lunes, 20 de febrero de 2012

.

Detesto oír sonar el puñetero móvil cuando estoy durmiendo, pero esta mañana ha sido diferente. Eran las once y yo ya estaba con los ojos como platos, porque acababa de sonar mi móvil, y parecía una imbécil sin atreverme a mirarlo...¿y si no eras tú?. Al final lo miré, y no, no eras tú. Era prontísimo y seguro que a esas horas estabas todavía dormido... y aunque estuvieras despierto, en lo último en lo que pensarías sería en hablar conmigo...
Estaba a punto de volver a dormirme, justo a punto... Y a las 11:33, volvió a sonar un pitido. Sonreí y pensé que era la imbécil de mi mejor amiga, pero no... esta vez si eras tú. Joder, ni siquiera me puse de mal humor, así da gusto madrugar. 
Creo que no hay despertar más bonito que aquel en el que tu "Buenos días preciosa" me alegra el resto del día. Te quiero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario